

La llorona México
Las leyendas urbanas son historias que se han contado desde el principio de los tiempos, sin embargo, a medida que pasan los años, estas historias se tergiversan tanto que hacen que aparezcan muchas versiones de un mismo relato. Entre una de estas historias tan conocidas y a la vez tan aterradoras se encuentra la llorona, una leyenda originaria de México que cuenta la vida de una mujer que, después de su muerte, vaga por los canales y ríos llorando por sus hijos.
La llorona: una popular leyenda de terror
La leyenda de la llorona fue originaria de las tradiciones mexicanas, sin embargo, debido a su gran popularidad se ha expandido por otras zonas del mundo; siendo incluso una de las historias de terror que más ha causado temor entre las personas.
Según algunos testimonios, hay personas que la han visto merodear por diferentes calles, iglesias, vías del tren o cualquier otro lugar solitario, en donde quizá pudiera ella encontrar a sus hijos; pero su sitio habitual es cerca de los ríos y lagos.
Al parecer se trata de una mujer hermosa, alta, delgada y vestida de blanco, que va penando por las almas de sus hijos. Las personas que la han visto, aseguran que en las noches comenzaban a escuchar llantos de dolor, al comienzo pensaban que se trataba de una chica abandonada, pero luego se dieron cuenta que algo extraño estaba sucediendo, ya que estos lamentos se escuchaban todas las noches.
Nadie quería salir para ver qué era lo que ocurría, sin embargo, al ser algo ya de todas las noches, algunas personas se armaron de valor para ver de quien se trataba. La sorpresa para ellos fue ver a una mujer vestida de blanco caminando y gritando ¡ay mis hijos!, pero lo realmente sorprendente fue que al seguirla se dieron cuenta que justo cuando ella llegaba al río, desaparecía entre las aguas.
Fueron tantos los lamentos que se escuchaban cada noche que las personas comenzaron a llamarla “la llorona”, que según dicen, era el alma de una mujer que estaba perdidamente enamorada de un español y que ahogó a sus hijos, y por eso está condenada a pasar su eternidad buscándolos.
Leyenda de la llorona: historia
La leyenda de la llorona, que data de la década de 1500, cuenta la historia de una mujer indígena muy hermosa, llamada María. Ella nació en una familia humilde, pero al ser vanidosa y tener una apariencia deslumbrante, no se conformaba con poco, por eso pensaba que debía casarse con el hombre más guapo y rico del mundo.
Por las noches, María siempre se ponía un bello vestido blanco, para entusiasmar a todos los hombres que la admiraban y la veían pasar; esto lo hacía con el fin de aumentar su egocentrismo y ver si daba por fin con su enamorado.
Un día, la búsqueda de su hombre perfecto terminó cuando a la aldea llegó un joven español de elevada clase social. Al verlo, ella supo de inmediato que ese sería el hombre ideal para ella, por lo que utilizó sus atributos para ganárselo, y efectivamente lo consiguió.
No cabe duda que María estaba perdidamente enamorada de él, y del fruto de ese romance nacieron dos niños, a quienes ella cuidaba, amaba y protegía mucho. Según las historias, se dice que ella quería formalizar la relación, pero siempre que hablaba del tema él se negaba o la ignoraba por completo.
La relación entre ambos cambió de una manera drástica, él ya no se preocupaba por ella y se la pasaba bebiendo alcohol, e incluso muchas veces la dejaba sola en casa con los niños. Un día la hermosa mujer se enteró, por la propia confesión de él, que su amado estaba casado con una dama de clase alta y que por eso la dejaría. Efectivamente así fue, la dejó, pero de vez en cuando regresaba a la aldea para visitar a los niños, por eso la devastada María comenzó incluso a sentir resentimiento hacia ellos.
Cuando todo comenzó
Una noche, María decidió ir a pasear con sus hijos para distraerse, por lo que se dirigió hacia un sendero cerca de un río. Al llegar allí, observo que un carruaje se acercaba y al mirar se dio cuenta que estaba su amado en compañía de una elegante dama. El joven al verlos, se detuvo, hablo con sus hijos y se fue, ignorando completamente a María.
Después de ver esa actitud, María se enfureció tanto que agarró a sus hijos y los arrojó al río, dejando que se ahogaran. Sin embargo, cuando entro en sí, se dio cuenta de lo que había hecho y corrió por la orilla del río con la esperanza de salvarlos, pero ya era demasiado tarde.
María se derrumbó en una pena inconsolable, llorando día y noche. Durante ese tiempo ella no comía nada, lo único que hacia era caminar a lo largo del río con su vestido blanco, en busca de sus hijos, hasta que finalmente murió a orillas del río.
Hechos posteriores
Aunque la historia de esta leyenda varía mucho, se dice que la llorona deambula cerca del rio y mata a todo aquel que trate de acercarse a ella; sean estos hombres, mujeres o niños. Mientras que otras versiones aseguran que esta mujer solo se interesa por los niños, por lo que si ve a alguno caminando solo por las noches, se lo llevará.
Es por ello que muchos padres se aseguraban de que sus hijos no salieran solos por la noche, ya que temían que el alma en pena de esta mujer, se los llevará y nunca más supieran nada de ellos.
Tanto ha sido la popularidad de esta leyenda que ha llegado a otros países, incluso han sucedido algunos hechos posteriores que confirman la aparición de la llorona.
Uno de esos hechos involucra a Patricio Lujan, un niño que junto a su familia aseguran haberla visto en un arroyo entre Mora y Guadalupita, en Nuevo México. En la década de 1930, ellos se encontraban en su propiedad cuando de repente aparece una mujer alta, delgada y vestida de blanco, quien sin decir ni una palabra solo caminaba hacia el arroyo. Pero algo que sin duda les sorprendió mucho es que parecía que ella estaba flotando sobre el agua y de repente desapareció sin dejar rastro; sin embargo, momentos después reapareció mucho más cerca de ellos y luego desapareció nuevamente.
La familia buscó huellas, pero no encontraron nada, por lo que no tuvieron duda de que la mujer que vieron se trataba de la famosa llorona.
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